PRUEBA: Ford Fiesta 1600 Brunells
Hacía ya tiempo que andaba tras la oportunidad de poder subirme a este auténtico “trueno” que surca los trazados de montaña dentro de los Campeonatos de España y Cataluña. Al regreso de la Subida a Engolasters, en Andorra, junto con Miguel Brunells, su experto mecánico “Pepito”, sobradamente conocido por todos los buenos aficionados, y Jose M.ª Ventura, hijo del director de la Escudería Auto Layetana, tomamos rumbo al circuito de Calafat para realizar allí la toma de contacto.
Después de sentarse en el ajustado asiento (Miguel Brunells lo tiene exactamente a su medida), en seguida tienes la impresión de estar a los mandos de algo especial, un fuera de serie. Segundos más tarde, tras la arrancada, esta impresión viene a confirmarse de inmediato.
De entrada, unas cuantas vueltas, sin apurar demasiado, sin exigirle a la mecánica. El coche responde de forma sensacional, va desahogado y casi él mismo te solicita el ir a más.
Tras una detención breve, primera ojeada mecánica y después, de nuevo a la pista para seguir ensayando, ahora ya en plan mas “racing”.
El coche es muy fiable, resulta en verdad difícil el hacer un trompo, la dirección es perfecta y sólo está algo corto de desarrollo, cosa lógica, teniendo en cuenta que estaba rodando en circuito con un desarrollo propio de subida de montaña. En el momento de realizarse este ensayo llevaba un desarrollo 12 por 49, es decir, a 8.600 r. p. m., unos 162 km/h ., cuando lo más apropiado hubiera sido un 15 por 56, o lo que es igual, 178 km/h ., a 8.600 r. p. m. En este tipo de coches, idóneos para la competición en montaña, los desarrollos suelen variar constantemente y a tenor de los distintos trazados.
UN MOTOR BRILLANTE
Este Ford Fiesta 1600, después de estar en proyecto más de diez meses (a causa de problemas en el suministro de recambios), fue preparado por el propio Miguel Brunells en sus talleres de competición en un espacio record de menos de dos meses. En la actualidad sólo lleva ocho carreras a sus espaldas, con los consiguientes entrenamientos. Se encuentra en su momento óptimo de puesta a punto.
El motor, uno de los más destacados, es delantero transversal, con cuatro cilindros en línea, teniendo un diámetro/carrera de 81 por 77,6 mm ., con una cilindrada total de 1.598 c.c. Este Fiesta 1600 tiene una potencia de 172 CV. a 8.100 r.p.m. Arbol de levas lateral, alimentación a cargo de dos carburadores Weber 45-DCOE de doble cuerpo, encendido electrónico (Lumination) distribuidor Lucas y engrase por carter seco con doble bomba de aceite (capacidad, siete litros de aceite), son algunas de sus características.
Se trata de un tracción delantera, con palieres reforzados y juntas homocinéticas especiales, embrague monodisco en seco sinterizado (marca AP), caja de cambios Hewland con cuatro velocidades y autoblocante también Hewland.
SUSPENSION, DIRECCION Y FRENOS
La suspensión, algo dura, como corresponde a un vehículo de notables prestaciones en su parte delantera es del tipo McPherson, con amortiguadores Selex y trapecios con muelles incorporados.
La suspensión trasera conserva el eje rígido con muelles helicoidales, barra Panhard y estabilizadora especial reforzada.
Con anterioridad ya hemos dicho que la dirección es otro de los puntos destacados del coche. Otro punto importante y sobresaliente, los frenos: de doble circuito, siendo los delanteros de disco ventilados de 267 mm. de diámetro, con cuatro bombines por rueda (Lockheed). Los traseros, de disco ventilados de 242 mm. de diámetro, con bombín sencillo, con freno de mano.
OTRO FACTOR IMPORTANTE: NEUMATICOS
El Ford Fiesta 1600 que Miguel Brunells esgrime como su mejor arma en los Campeonatos de Montaña, especialidad en la que sin duda es un veterano consumado y con un palmarés ampliamente reconocido (no en balde está repleto de éxitos), va equipado con neumáticos Pirelli Corsa P-7, delanteros de 220 y traseros de 175 “, montados sobre llantas Targa, de 13 pulgadas de diámetro, las anteriores de 8 pulgadas de garganta y las posteriores de 6 pulgadas. Un calzado de extraordinario agarre al suelo y notables prestaciones.
Dentro del apartado de dimensiones y peso, hay que hacer constar que el Fiesta 1600 tiene una distancia entre ejes de 2.28 metros, una longitud total de 3,70 m. por una anchura de 1,64 m . y una altura de 1,36 m . Su peso aproximado es de 784 kilos.
RESUMEN
A la hora de hacer un pequeño balance sobre lo experimentado a los mandos de este vehículo, llegamos a las siguientes conclusiones.
Este 1600 tiene un robusto conjunto mecánico, de fácil mantenimiento, según nos confirma el propio Brunells, buena estabilidad, unos frenos destacados, de gran potencia y efectividad; el motor en líneas generales es, quizá, su mejor apartado, sin olvidar el cambio.
Tiene un comportamiento altamente fiable, se trata de una montura muy noble y que raramente hace un extraño.
Una serie de cualidades que hemos podido experimentar de cerca, con sólo un reparo, una quizá poca adherencia en arranque parado, aunque ello viene derivado de ser un vehículo de tracción delantera. Brunells asegura que esta “pega”, por así denominarlo, la experimenta especialmente en las carreras de montaña.
Un Ford Fiesta 1600 sobresaliente, una auténtica “bomba” que sin duda va a dar mucha guerra en la presente temporada, frente a sus más directos rivales, los Fernández, Raddi, Vilariño, Goiburu, Arenzana, etc...
En la disciplina montañera destaca en la actualidad la pugna que mantienen las barquetas con los grupos 2. En el Campeonato de España, por ejemplo, en los siete primeros lugares figuran cuatro barquetas, los Lola de Fernández, Raddi y Arenzana y el Osella de Caba, frente a los Talbot-Rallye de Vilariño y Goiburu, y naturalmente, el Ford Fiesta 1600 de Brunells, un vehículo realmente puntero, un verdadero fuera de serie.
Fuente: VELOCIDAD Nº 1038, 1 de Agosto de 1981.