PRUEBA: Talbot Solara Escorial 1.9D

Cuando hace sólo unas semanas teníamos la oportunidad de realizar una primera toma de contacto de este nuevo modelo de fabricación española, la impresión que sacamos fue muy buena. Pero esta impresión ha sido muy mejorada después de haber sometido al coche a una prueba bastante exhaustiva, en la que hemos recorrido más de 2.000 km . en diversas condiciones climatológicas, y sobre todo tipo de carreteras, desde carretera Redia hasta autopista, pasando por las preciosas y superviradas carreteras del Pirineo catalán. Y después de todos estos kilómetros podemos ratificarnos en todo lo dicho después de la presentación en cuanto a comodidad, confort, prestaciones y, sobre todo, consumo.

El hecho de que Talbot nos proporcione una unidad para realizar una prueba a los pocos días de hacer la toma de contacto es muy positivo, ya que se tiene la oportunidad de comprobar aún en caliente todo lo que se ha comentado sobre este modelo tras una primera impresión. Además, de cara a los posibles compradores, éstos pueden disponer de una guía de cómo es el coche antes de decidirse sobre el modelo a comprar. Por estas razones, hay que felicitar a Talbot. Bueno, por éstas y por hacer un coche muy bueno en todos los sentidos, que muy probablemente tendrá una magnífica aceptación en el mercado español, aunque, lógicamente, la última palabra en este sentido la tienen los compradores.

ESTETICA: CLÁSICA, PERO MODERNA

La línea de este Talbot Solara Escorial no puede ser más clásica, no tiene ninguna estridencia ni nada llamativo. Se trata de una berlina con sus tres volúmenes perfectamente diferenciados; lo que podríamos llamar una “berlina de libro”. Las modificaciones introducidas con respecto a las versiones de años anteriores son meros detalles, dentro de una línea que es muy “resultona”. En este sentido hay que señalar los nuevos embellecedores para las ruedas, de una discreción total. Otro importante detalle es el pintado de los montantes de las puertas y ventanillas en negro; lo que, unido a los colores claros de la carrocería, le da un interesante aspecto. La superficie acristalada es grande, permitiendo una gran visibilidad interior y, sobre todo, una gran luminosidad en el habitáculo.

Pero vayamos con el tema de las modificaciones, que aunque son pocas hay que comentarlas. La parrilla ha sido rediseñada, siendo ahora algo más agresiva. Va pintada en los mismos colores que el resto de la carrocería. En cuanto a los paragolpes, incluyen ahora una banda pintada en negro, mientras que por debajo, a pesar de formar una sola pieza, es de color igual al de la carrocería. De esta manera, da la impresión de que el paragolpes es más fino, lo que le hace más ligero a la vista.

INTERIOR: AUSTERO Y COMPLETO

Es difícil definir cómo es el interior del Solara Escorial, ya que existen algunas contradicciones dentro del mismo. Si los asientos rozan la perfección en cuanto a la calidad de los materiales, del techo se puede decir casi lo contrario. Si, porque a simple vista parece que este elemento está tapizado en terciopelo de una magnífica suavidad, pero cuando se toca se comprueba con “horror” que es plástico duro. En cuanto al resto del habitáculo, los materiales que se han utilizado son de muy buena calidad.

El cuadro de instrumentos hay que señalar que se ve muy cómodamente. Una “chapuza” que se da en la mayoría de los Diesel es que el espacio que en las versiones de gasolina ocupa el cuentavueltas aquí va “llenado” con un reloj analógico, a todas luces excesivo de tamaño. Pero la solución sería difícil, ya que o se instala un cuentavueltas, o bien se diseña un cuadro para los gasolina y otro para los Diesel, con la consiguiente complicación técnica. Los mandos para las luces antiniebla están muy bien situados en la consola central, mientras que el indicador del sistema de precalentamiento de las cámaras de combustión se encuentra a la izquierda de la base del volante, en un sitio fácilmente visible.

Con respecto a las palancas de mando, son muy eficaces, pero con la salvedad que hacemos a todos los coches en los que la palanca de la izquierda sirve para los intermitentes, las luces, las ráfagas y el claxon, con un solo mando. Las ventanillas se accionan muy fácilmente, con los botones situados en la parte superior de la puerta. Para el cierre centralizado, es el seguro de la puerta del conductor el que acciona los de las demás puertas.

Los asientos delanteros son muy buenos, cómodos y bastante envolventes. Puestos a mejorarlos, únicamente se podría conseguir que sujetaran algo más el cuerpo. Pero tal y como salen actualmente están muy bien. En los asientos traseros se incorporan de serie los reposacabezas y el apoyacodos central. En la parte trasera del techo y en posición centrada existe un punto de luz que permite perfectamente leer o buscar cualquier cosa a los ocupantes de las plazas traseras. El maletero es amplio, pero hay que hacer esa pequeña salvedad de que tiene poca altura utilizable. Porque en cuanto a profundidad, no tiene nada que envidiar a los maleteros de coches más grandes que el Escorial.

MOTOR: ESTA YA MUY VISTO

Empezar a soltar una “ristra” de elogios sobre este motor es tonto, cuando se trata de un grupo motriz tan conocido como es este XUD del grupo PSA. Decir que rinde 65 CV. y que tiene una elasticidad a toda prueba, a la vez que unas cifras de consumo bajas, parece algo casi tópico. Por ello, no vamos a habar nada más sobre el motor, salvo mencionar que cuando los técnicos de motores diseñaron el XUD lo hicieron para su incorporación en el Peugeot 305, que es el equivalente del Solara en la marca Peugeot.

Por ello viene perfectamente a medida con respecto al peso y a las dimensiones del coche, cosa que no ocurre con el Horizon, que está algo sobrado de motor.

AL VOLANTE: MAGNIFICO VIAJERO

Durante la prueba que hemos realizado, cada vez nos ha ido gustando más el coche, y eso es raro cuándo se hacen muchos kilómetros, puesto que según se hacen más, cada vez se encuentra uno más cansado y más harto de conducir. Pero con este coche no ocurre esto, lo cual es punto muy positivo para el Escorial. A esto contribuye la posición al volante, que es muy buena. Eso sí, cuando se sienta uno al volante por primera vez; se tarda bastante hasta que se encuentra la posición, porque el movimiento del respaldo es algo brusco. Por ello, hay que ir buscando con tacto. Pero cuando ya se ha conseguido es muy cómodo. La dirección, muy suave —es asistida—, también ayuda al confort de marcha, así como la elasticidad del motor. Si circulamos por una carretera y disminuimos la velocidad por cualquier motivo, podemos volver a acelerar sin necesidad de cambiar. En cuanto a la palanca de cambios, es cómoda y muy rápida, aunque los desplazamientos son algo largos. Por otra parte, la separación entre 1.ª-2.ª y 3ª-4.ª es pequeña, por lo que algunas veces se pone la 4.ª cuando se quiere ir en 2.ª. Pero la práctica evita estos fallos.

La visibilidad es muy buena. Los retrovisores exteriores, situados a ambos lados, son muy interesantes cuando uno se acostumbra a utilizarlos, ya que si no el de la derecha queda como un accesorio superfluo y fácilmente rompible por una moto. La iluminación es otro aspecto muy positivo de este coche, máxime si tenemos en cuenta la presencia de los “antiniebla”, que resultan muy útiles en algunas ocasiones.

En el apartado de ventilación es correcta, gracias a las tres tomas de aire presentes en el salpicadero. En los laterales del mismo aparecen las tomas de aire para evitar el empañado de las ventanillas, que son muy útiles cuando se circula con lluvia y todo tiende a empañarse rápidamente.

COMPORTAMIENTO: NOBLE Y ALGO BLANDO

El comportamiento de este Solara Escorial es muy noble. En el momento que aparece el más mínimo problema con la estabilidad, el coche lo avisa rápidamente, con lo que se puede tomar una solución con facilidad. Durante la prueba que hemos realizado, hemos tenido oportunidad de “negociar” todo tipo de curvas, lentas, rápidas, de radio medio, y en ninguno de los casos se han planteado “situaciones límite”, aunque demuestra una ligera tendencia a irse de la parte trasera. Pero es muy fácil de encauzarlo por el buen camino otra vez.

Otro tema muy diferente es el de los balanceos de carrocería, ya que cuando decíamos que es muy cómodo en todo tipo de terrenos, deberíamos haber hecho una aclaración. En curvas muy lentas —como hemos comentado en otro apartado de la prueba, una parte de la misma transcurrió por el Pirineo catalán—, el conductor y el “copiloto” no tienen problemas, al ir “atados” con el cinturón de seguridad y contar con la ayuda suplementaria de la buena sujeción de los asientos delanteros. Pero para los ocupantes de las plazas traseras, un viaje por una zona de este tipo, con la suspensión blanda que lleva este coche, puede resultar un suplicio. En este sentido se produce una importante mejora al llevar una cierta carga en el maletero.

El comportamiento del cambio es también muy bueno. El escalonado de las marchas a nosotros nos parece perfecto. La quinta no es excesivamente larga, como ocurre en otros muchos coches. Este vehículo tiene una “alegría” de marcha más propia de un gasolina que de un Diesel, como en realidad es.

La palanca de cambios ya hemos comentado que es rápida y eficaz, aunque con desplazamientos algo largos. Y del embrague hay que comentar que es algo brusco en su funcionamiento, aunque uno se acostumbra en seguida al embrague del Solara.

La dirección es rápida, con 2,8 vueltas de volante entre topes, y sobre la comodidad de su manejo es bastante tonto hacer algún comentario más que no sea decir que lleva dirección asistida. Las maniobras en ciudad son “una gozada”, a pesar de los 4,393 metros de longitud total del coche. Los frenos no ventilan demasiado bien, pero son muy eficaces.

CONSUMOS: SON OPTIMOS

Las cifras de consumo que hemos obtenido durante el transcurso de la prueba son realmente muy buenas. Diríamos que es lo mejor del coche, junto con la comodidad de marcha. Que un vehículo de las características de éste, con los 4,393 metros de longitud y esos 1.100 kilos de peso en vacío pueda gastar menos de 5 litros/100 km. cuando se mantiene la velocidad estabilizada a 90 km/h . es una cifra excepcional. Cuando la velocidad que se mantiene son los 120 km/h ., muy próxima a la velocidad máxima del coche, el consumo aumenta hasta llegar a los 6,75 litros a los 100 kilómetros , que sigue siendo muy buena.

En el caso de conducción rápida, las cifras se disparan algo más, pero aun así, dentro de unos límites muy razonables, y eso teniendo en cuenta que estas medidas las realizamos por carretera de montaña, con muchas curvas, donde la palanca de cambios apenas paraba un momento.

Esa es la causa de que este valor resulte algo elevado. El consumo total de la prueba fue de 8,72 litros/100 kilómetros.

La autonomía es también buena, y eso es un dato que parece no tener importancia, pero que la tiene, y mucha, para esas personas a las que les gusta salir de un sitio y no tener que ir haciendo parada tras parada hasta llegar a su destino.

La autonomía es también buena, y eso es un dato que parece no tener importancia pero que la tiene, y mucha para esas personas a las que les gusta salir de un sitio y no tener que ir haciendo paradas tas parada hasta llegar a su destino.

Con 665 kilómetros de autonomía, calculada a partir del consumo medio de la prueba –si se utiliza normalmente el coche no se consume tanto como nosotros hemos gastado-, se puede ir casi a cualquier sitio de nuestra geografía desde Madrid. Si se quieren hacer más kilómetros, ya no hay nada que hacer más que parar en la gasolinera. Y entonces tendremos esa alegría adicional de ver que el libro de nuestro combustible cuesta casi la mitad que el de los demás. Al menos a nosotros, que estamos acostumbrados a utilizar coches de gasolina, ver que se le piden al empleado de la gasolinera 2.000 pesetas y que con ese dinero casi se llena nuestro depósito es una alegría adicional muy importante.

PRESTACIONES: MÁS QUE ACEPTABLES

Las prestaciones de que es capaz este Diesel de nueva aparición en nuestro mercado son muy buenas, si tenemos en cuenta que se trata de un Diesel cuyo peso en vacío es de 1.100 kilos y que los consumos son muy ajustados. Esos 151 km/h. que hemos conseguido de velocidad máxima pueden parecer escasos, pero para un usuario medio que lo único que quiere es hacer kilómetros y llegar tranquila y cómodamente a su lugar de destino, con pocos problemas para su bolsillo, es más que ideal. Los valores de aceleración están muy acordes con su velocidad máxima, y en cuanto a las cifras de recuperación, hay que señalar que son muy buenas, gracias a la gran elasticidad del motor XUD.

Con este coche se pueden conseguir unas medias muy brillantes cuando se sabe aprovechar bien las oportunidades que ofrece el tráfico de carretera.

CONCLUSIÓN: EQUIPAMIENTO Y AHORRO

Este Solara Escorial Diesel que hemos tenido oportunidad de probar nos ha gustado mucho. Es más, incluso nos ha gustado mucho más que cuando hace unas semanas tuvimos que realizar la toma de contacto.

Entonces la impresión fue más bien una intuición de lo que realmente podía ser el coche. Pero todo se ha ratificado con claridad.

Si hay que señalar algún aspecto con respecto a los demás, nosotros haríamos hincapié en los consumos muy bajos, y sobre todo, en el acabado y en el magnífico nivel de equipamiento con que cuenta este coche. No sólo por la buena calidad de los materiales empleados en él, sino también por la incorporación de elementos como la dirección asistida, las cerraduras eléctricas o las ventanillas automáticas, los faros antiniebla, etc.

Cuando estábamos realizando esta prueba, se nos ha ocurrido una idea que puede parecer descabellada, pero que tendría su interés de cara al mercado. Se trata de utilizar la base del Solara para realizar un vehículo familiar, que en nuestro país tienen una buena acogida. La prueba es que una marca como Renault mantiene en el mercado su modelo R-12 en este tipo de versión. Incluso dentro del grupo Peugeot-Talbot se están importando modelos como el 505 Break, a pesar de los problemas arancelarios existentes al tratarse de un modelo de importación.

Tal vez dentro de unos meses podamos ver un Solara Familiar. Por lo menos, hay “madera” para poder hacer un coche así.

Fuente: Velocidad Nº 1208, 17 de noviembre de 1984

Texto: C. Cancela